Por Miguel Chajin Flórez
La teoría sobre los temperamentos es una de las más antiguas de la ciencia, y sigue vigente, con aplicaciones que van más allá de la Psicología, como se verá en este capítulo. Regularmente se asocia y aplica esta teoría para identificar esquemas o tipos de rasgos emocionales, que para utilizar los nombres que le dio Hipócrates, el médico y filósofo griego que presentó la primera clasificación, con los nombres de melancólico, flemático, sanguíneo y colérico, también puede servir para identificar perfiles laborales, como el controlador, planificador, negociador e innovador, y soporte también de los estilos de liderazgo autocrático, burocrático, democrático y estratégico, y de los estilos de aprendizaje repetitivo, aprendizaje procedimental, aprendizaje en equipo y aprendizaje creativo.
Desde los temperamentos podrás ser consciente que hay unas inclinaciones de tu modo de ser que están en la base de las relaciones sociales, de la manera cómo asumes tus circunstancias, lo que te caracteriza, limita como también te puede favorecer en tu proyecto de vida; igualmente, el mundo de las vocaciones, ocupaciones y trabajo, ocupa gran parte de nuestra vida y cada quien lo asume de determinada manera, por lo que es importante saber cómo abordarlo mejor, y especialmente en qué tipo de actividades podemos tener un mejor resultado.
De otra parte, sin importar el tipo de estatus y roles sociales, cada quien tiene un estilo de liderazgo y eso significa que no hay una sola forma de conducir su propia vida, la familia, y las interacciones sociales, sean familiares, de amistad, socioculturales, económicas y políticas; de igual forma, el mundo de la educación, sea formal o no, tiene estilos de aprendizaje, y se puede sacar provecho del que más desarrollo se tenga, sin que signifique que no se pueda mejorar en los demás.
Los talentos, por su parte, son todas aquellas capacidades y habilidades que se creen naturales, o que regularmente se les facilita a las personas, y puede asociarse a los temperamentos y alinearse a estos, lo que constituye el desarrollo de la metainteligencia, como la habilidad de ser consciente de su propia inteligencia y servirse de esta para agregar valor en cualquier organización. La Talentología como una subdisciplina de la Administración, la Educación y de otras ciencias, como la Psicología y Sociología, es de carácter metateórica, y permite una integración dialógica entre el individuo y la sociedad.
Preguntas de interés:
- ¿Qué importancia tiene identificar tus temperamentos?
- ¿Pudiera asociarse tu temperamento a tu perfil laboral?
- ¿Qué gano con identificar mi estilo de pensamiento?
- ¿Pudiera establecer mi estilo de dirección a través de mi temperamento?
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